Celso Garza Guajardo

Los objetos y los recuerdos: Los cubrevientos

Celso Garza Guajardo

Aquéllos, los que estaban en hilera, uno tras otro… por las cuatro calles de los colegios… por Porfirio Díaz, por Mina, Escobedo, Doctor Coss… dos calles largas y dos cortas… las calles de los colegios, de las escuelas monumentales “Manuel M. García” y “Teresa R. De García”… los cubrevientos rodeaban las escuelas como formando un valladar de sombras para retener los vientos y los polvos.

Seguir leyendo
Celso Garza Guajardo

Aquellos normalistas

Celso Garza Guajardo Era una normal pequeña, apegada al nombre y al ideal… funcionaba en la antigua Escuela Secundaria frente a la plaza y después en la casona de la esquina sur-poniente de Lerdo y Ocampo.

En septiembre de 1955, se traslado al Centro Escolar “José S. Vivanco”, en la segunda planta primera del lado oriente, en tres salones, Dirección y Secretaría… esa fue su primera casa y de hecho la única… contó además con la novedad de una escuela primaria anexa para las clases de observación escolar.

Seguir leyendo
Celso Garza Guajardo

Quehaceres y costumbres: Ir al panteón

Celso Garza Guajardo

Primero la exclamación es únicamente mental… cada quien está contando los días que faltan para el 2 de noviembre… no es que la gente no tenga nada que hacer, al contrario, quienes más piensan en el Día de los Muertos son precisamente quienes más están ocupados y esperan la llegada de ese día, como un descanso en la nostalgia, como un relax con la tierra y su linaje.

Seguir leyendo
Celso Garza Guajardo

Crónica de un empeño

Celso Garza Guajardo El domingo 17 de mayo de 1942, se firmó el Acta Constitutiva de la Sociedad Nuevoleonesa de Historia, Geografía y Estadística. Los antecedentes de tal hecho habrán de buscarse en toda esa larga cadena de la historiografía regional que se inicia con Alonso de León, José Eleuterio González, Hermenegildo Dávila, Rafael Garza Cantú, David Alberto Cossío, Santiago Roel, Héctor González y muchos otros más.

Seguir leyendo
Celso Garza Guajardo

Ella alumbraba la aldea

Celso Garza GuajardoLa luna de la aldea nos seguía… nos seguía y nos seguía en las noches continuas… de una noche a otra, la luna pasaba de fase en fase, y nos seguía la luna grande, alegre o triste, a diferencia del sol, no nos dominaba, nos acompañaba y es más, nos buscaba… nosotros también la buscábamos.

Seguir leyendo