Todos en la vida tenemos rutinas… rutinas de trabajo, de pensar y de actuar. Son rutinas de las que no se puede escapar si es gente ordenada y productiva, ya que a través de ellas se manifiesta la disposición del trabajo y la transformación de los valores teóricos en hechos palpables. Por eso no hay impulso a nuestras vidas y a la vida de los demás, si no se ha laborado a través de una ferviente rutina personal. La grandeza y humildad de y una persona gira siempre en torno a la rutina que tuvo ayer, que mantiene hoy y que tendrá mañana.
El maestro Rubén Eugenio Solís Montemayor ha sido siempre un excelente trabajador de la educación… un educador que ha consolidado valores pedagógicos en toda la extensión del concepto. Ha sido maestro siempre comprometido con su profesión con sus alumnos y con sus escuelas. Maestro dentro y fuera del aula… maestro los 365 días del año por casi ya, 35 años.
Egresó de la Escuela Normal “Pablo Livas” en 1958, formando parte de aquella generación en la cual destacaron figuras como: Benito López, Benito Ríos, Alicia Treviño, Mario Guzmán, Celestina Mata, Elidia Montemayor, María Elena Villarreal Esparza, sólo por citar algunos de ellos. Su práctica pedagógica la realizó en la escuela “Manuel M. García”… después de laborar un año en la Escuela Anexa a la Normal se traslada a la ciudad de Monterrey a fines de 1959, donde labora en diversas escuelas primarias, hasta que en 1962, se estableció definitivamente en San Nicolás de los Garza iniciándose como maestro de segunda enseñanza en la legendaria Secundaria “Vicente Guerrero” de la Colonia Chapultepec, lugar que adopta como domicilio personal.
Hasta 1976 es maestro de planta y a partir de ese año inicia sus ascensos como auxiliar y sub–director en las Secundarias Nº 12 y Nº 5 por espacio de ocho años. En ese tiempo también en secundarias nocturnas, por nueve años en el Colegio Justo Sierra de Monterrey y en 1971 ingresa a la Escuela Preparatoria No. 7 de la U.A.N.L. en la Colonia Las Puentes.
Su desempeño magisterial ha sido siempre de banquillo de gis y de pizarrón… su contacto constante con los salones de clase, con las listas de alumnos y la revisión de exámenes.
Ha sido maestro de Ciencias Sociales, de Física, de Biología y de Educación Física, especialidades que cursara en la Normal Superior… Es maestro y deportista, catedrático y entrenador… año tras año, en el devenir de grupos y grupos en el paso de generaciones… hoy educa a los hijos de sus primeros alumnos… todos ellos en San Nicolás a donde llegó desde hace más de un cuarto de siglo para arraigar y formar su familia junto con la maestra Florinda… nicolaítas son sus hijos y en su hogar los recuerdos sabinenses.
El maestro Solís Montemayor se jubiló en el sistema estatal en 1987 mas continuó su ejercicio magisterial en la escuela preparatoria… igual que siempre como maestro de banquillo, de gis, pizarrón, cátedra diaria y revisión de examen. Todo ello lo hace como si fuera el primer año de labores escolares… su vida ha trascurrido entre la casa y la escuela, entre la escuela y la casa, entre las aulas y los ejemplos deportivos… de su expediente laboral el número de faltas se cuentan con los dedos de las manos y siempre por causa de fuerza mayor… ésa es la calidad del tiempo magisterial de Rubén Eugenio Solís Montemayor… calidad del deber cumplido día tras día… rutina que como él cree y practica la profesión de maestro.
Bien por el ejemplo… bien por los de su generación…
10 de noviembre de 1990.