Juan Morales Garza

Descontento de trabajadores de Manuel M. García

La Vida Inquieta de Don Manuel M. García

Juan Morales GarzaLa semana pasada escribimos como Don Manuel tuvo que enfrentar a sus trabajadores por el motivo de anunciarles que les iba a rebajar el sueldo, de 3 pesos a 1 peso diario como salario mínimo y con esta acción enardeció enormemente a sus empleados, entre los cuales había Ingenieros Civiles, Arquitectos, topógrafos, operadores de maquinaria agrícola, mecánicos, albañiles, carpinteros, mayordomos, cabos, oficinistas, peones y campesinos, etc., los cuales difundieron el disgusto entre la gente del pueblo; a todos estos se les dijo que los que estuvieran conformes seguirían trabajando con él y los que no aceptaran pasaran para ser liquidados hasta el último día de trabajo.

Tengo el conocimiento que el primero que renunció fue el contratista Fernando Baldazo, independientemente de muchos otros que prefirieron renunciar a ver sus ingresos mermados en esa forma tan drástica.

Pongámonos por un momento en los zapatos de Don Manuel para afrontar tal situación; como también veamos la situación de los trabajadores afectados, para ambas partes fue una situación muy difícil. Considerando que habían transcurrido 10 años desde la llegada de Don Manuel a Sabinas en 1926 hasta la entrevista del Periódico el Porvenir en 1936, todas las obras que había emprendido habían sido terminadas, exceptuando los tres proyectos a futuro, que lo anunciaron los reporteros pero no se llegaron a efectuar, estos eran la cremería, la empacadora y la línea de transporte de carga y refrigeración.

En el noreste de nuestra patria y de nuestro estado de Nuevo León, específicamente en el municipio de Sabinas Hidalgo, consideradas estas tierras como desérticas o semidesérticas. Solo nuestro Dios Supremo como para compensarnos nos dota de un lugar maravilloso, que es un oasis, donde brota entre las peñas al pie de la sierra de Santa Clara o 3 picos, difícil de describir su agua pura y fresca, cristalina de un sabor excepcional y que al derramar su caudal ha prosperado la vegetación, donde abundan los sabinos, álamos, encinos, nogales, sauces, anacuas, comas, zapotes, fresnos, moras, lampazos y parras cimarronas, creo sin temor a equivocarme lo más parecido al Paraíso, donde nos hablaban los textos bíblicos y que se encontraban entre los ríos Tigris y Eufrates. Este tesoro sin el cual difícilmente se hubiera fundado nuestra cara aldea, considerado por los sabinenses patrimonio del pueblo por proporcionarnos el agua para tomar nosotros y nuestros animales y desarrollar una agricultura necesaria para nuestra subsistencia.

Don Manuel habló de 2 proyectos, el primero creación del Parque Chapultepec y el segundo canalizar el líquido del Ojo de Agua para producir energía eléctrica. Estos 2 sucesos, la rebaja del salario a los trabajadores y canalizar el agua para producir energía eléctrica fueron los detonantes para influir en el ánimo del pueblo en contra de Don Manuel por 5 grupos, los agraristas, los hacendados, los comunistas, los vecinos del Barrio del Aguacate y los políticos, de los cuales estaremos hablando posteriormente de la forma como fue la oposición hacia los proyectos de Don Manuel.

Mucho agradecería a toda aquella persona que posea fotografías y anécdotas en pro o en contra relacionadas con Don Manuel M. García, favor de dirigirse a los Tel. 242-22-98 o al correo electrónico juan-moralesgarza1 @hotmail.com con el Sr. Juan Morales.