Profr. Salvador Garza Inocencio

Gabrielito

Nuestras Cosas

Profr. Salvador Garza InocencioLo conocimos allí por la calle Antonio Solís, entre Zaragoza y Mina, lo vimos transformar largos trozos de madera en muchos muebles útiles para el hogar; sus hábiles manos fueron capaces de confeccionar mesas y sillas de todos tamaños y toda una serie de enseres domésticos.

En algunas ocasiones lo vimos con su lento paso por las calles del pueblo, siempre con un sencillo sombrero de palmito que cubría su cabeza.

Su trato era amable, a pesar de que era un hombre de muy pocas palabras, su seriedad lo caracterizó siempre, en su trabajo perdió uno de los dedos de su mano.

Cierta vez tuvimos la oportunidad de llegar hasta un cuarto donde él tenía su “centro de trabajo”; allí pudimos ver la lima, la escuadra, el martillo, el desarmador, la madera, los clavos, los tornillos y tantas cosas más.

Formó su familia, una familia sencilla y él un hombre de trabajo con el olor a la madera, y un trabajo entre el aserrín y la viruta, él como José, tuvo el oficio de carpintero, hoy recordamos a Don Gabrielito.

Pero así está el mundo y éstas son “Nuestras Cosas”.

Hasta la próxima.