Francisco J. Echazarreta

Instituto Benito Juárez (1902- 1931)

Lo que el tiempo se llevó

Francisco J. EchazarretaEste edificio fue fabricado para darle impulso a la educación en el pueblo. Educación a las niñas. Durante los primeros años de su construcción sus salones y el corredor se utilizaron a la enseñanza primaria, (29 años en total), había sido a iniciativa de los Sres. Pablo Salazar y Don Narciso Garza, la de que se construyera en este lugar; y una serie de eventos y colectas se organizaron para costear su construcción, claro y con ayuda del gobierno federal que presidía Don Bernardo Reyes.

Instituto Benito Juárez (1902- 1931)

Con un claro interior de casi 6 metros de alto. Una serie de columnas centrales soportaban las vigas de madera que fueron acomodadas. Se adornó el interior, con una serie de arcos hacía el sur y una barda separadora de sillar, para con la iglesia, luego una serie de vigas de madera uniformemente tendidas en el techo cuya orientación Norte-Sur se acomodó en 2 hileras, una la que quedaba sobre los salones, lado norte y la de un corredor amplio de lado Sur.

Una puerta principal de entrada y frente a la plaza, arriba el escudo de fabricación del edificio (1902) y un asta bandera que en los días festivos hacían ondear.

De las maestras encargadas en los primeros años fueron las hermanas Caballero, Cristina y María Cleofás, aquí, las niñas se acompañaban de una tabla enmarcada llamada “pizarra” que junto con el gis blanco servía para aprender el vocabulario y las palabras, con un trapo mojado y a veces algo de saliva se limpiaban.

Durante sus casi tres décadas de educación era un común el de que hermanas o parientes entre sí, fueran las maestras, así te encuentras con las hermanas Villarreal, Joaquina e Ignacia o las hermanas Cavazos, Aurora y Olivia o las hermanas Guerra, Guadalupe y Plácida o parientes entre sí como la malograda, Celestina y Rosenda Alcorta.

Pero cuánto evento no le ha tocado ver a esta construcción, como ver pasar aquel Ford “T” de 1904 y a partir de ahí todos y cada uno de los modelos de automóviles que año con año llegan al pueblo. La inundación de 1909 en la que el agua llenó toda el área de la plaza y esta escuela. O la de aquel hombre del globo aerostático que hacia propaganda para anunciar sus medicamentos (1910) y que se cayera de gran altura matándose. Por 1913 el año escolar casi se pierde por los disturbios de la “Revolución”. Lo mismo que en 1917 por la “Influenza Española” que dejara tan negra estela en nuestro municipio.

Otras maestras de los años veintes [(20s)SXX] fueron, la hermana del Doctor de Hoyos, Laura, Directora de dicha escuela, Adalia Guajardo, Elvira Viejo, Cristina González, Alejandra Villarreal de Chapa, Carmen Enríquez, Josefina Mier Ortega. Esta ultima directora, por 1926, la dirección, por ese tiempo a la entrada por la puerta frente a la plaza, a mano derecha, junto con el sexto año en el mismo salón, enfrente a mano izquierda del corredor el quinto año y así conforme avanzaban hasta el fondo en dirección oriente pasaban cuarto, tercero, segundo y primer año respectivamente, al fondo un arco de salida a los patios. El agua era tomada de tinas y cubetas que surtían de pozos de agua de los vecinos. Los sanitarios de pozos. Eran épocas en la que se carecía de agua potable y de drenaje. La llamada a entrar a clases era dada por las campanadas de la iglesia San José. Dejó de ser funcional, este Edificio, cuando fueron inaugurados LOS COLEGIOS (1931) (Esc. Manuel M. García y Teresa Rivera de G.) y los niños ahora encaminarían sus pasos al Barrio de “El Alto” en Sabinas Hidalgo.

Continuará

Secundaria Antonio Solís G. (1934-1954)