Feliz año nuevo

Editoriales

Cada 12 meses despertamos de un sueño cargado de ilusiones, con renovados proyectos otra oportunidad de vibrar con la esperanza de superar al ciclo anterior.

Una nueva etapa para abandonar la frustración de no haber realizado o concretado lo planeado, la tristeza, la angustiante desesperación y en ocasiones la soledad, el silencio cruel o las lágrimas ocultas de impotencia ante la negligencia o incapacidad de nuestros gobernantes.

Este 2009 nos maltrató por todos lados, atacándonos con muchas plagas, como la influenza, que para colmo de males nuestros vecinos nos la endilgaron como fiebre cochina, o algo parecido.

La pobreza y la ignorancia nos acechó, el valor de la moneda, la poca o nula visión de los elegidos por nosotros, tratando de sacar el buey de la barranca por el lado opuesto, contrariando, o llevándose en las espuelas a premios Nobel y demás, pero aquí la dejamos porque hoy estamos en otro plan.

Hoy termina el año y no cumplió con nuestras expectativas, ni permitió que aportáramos lo mejor de nuestro ser, nos arrebató la esperanza, truncó nuestros sueños y amenazó con secuestrar el futuro.

Pero sin querer nos dio más fuerza inmunizándonos de muchos males, la experiencia nadie nos la quita y de seguro con ella enfrentaremos el 2010, luchando desde cualquier trinchera donde nos toque desempeñarnos, desalojándonos del egoísmo, dejando a un lado los intereses puramente personales, actuando con cordura, más tolerantes, respetando las diferentes formas de pensar y opinar de nuestros semejantes, edificando puentes para dialogar y llegar a acuerdos para el progreso intelectual y económico de todos.

La luz del faro que nos guiará a la paz, la armonía, felicidad y prosperidad está a la vuelta de la esquina, al menos son nuestros deseos y espero se cumplan.

Feliz año nuevo