Francisco J. Echazarreta

La Escuela Anexa: Sus primeros años

Lo que el tiempo se llevó

Francisco J. EchazarretaDebió de haber sido allá por el lejano año de 1955, cuando en Sabinas Hidalgo iniciara sus clases una escuela “Sui- generis”, y fue muy gratificante de mi parte, iniciar este que era un laboratorio de nuevos practicantes, para la fábrica de maestros a los cuales, nosotros los alumnos de la primaria, les servíamos como “conejitos de indias” para sus laboratorios… Desde que se acomodaron en el centro escolar el local de la calle Doctor Coss. El edificio albergaba a la escuela Primaria, una Secundaria y la Normal que traía ya su nombre en Honor de Don Pablo Livas, mientras que todo el conjunto tomo el nombre de Centro Escolar José S. Vivanco.

Empecé a notar que cada lunes y en veces hasta entre semana, durante el año escolar. Bajaban, un montón de jóvenes de la segunda planta, cada uno cargando su banco, se arremolinaban alrededor de nuestro grupo y nosotros servíamos como materia prima, a las prácticas de aquellos jóvenes estudiantes de la Normal. Veía que sus compañeros, tomaban notas durante el desarrollo de la clase, para calificar al exponente, que en veces titubeaba o se apoyaba en sus apuntes o en el libro para exponer. Daba la impresión de que el Prof. Eugenio A. Solís G. fungía como “un rector”, porque aparte de pasear su silueta por todo el edificio, al iniciar una clase de algún practicante, nos presentaba al exponente y permanecía en el grupo por unos minutos, igual cuando venían los días de la toma de fotografía (esa impresión que congela los instantes y los vuelve eternos) bueno pues aparte de la primera directora del la primaria la maestra María del Pilar Garza Ch. aprecia el profesor Eugenio y la maestra del grupo…así fueron todas las primeras fotografías… de las generaciones primarias.

Había una extraña práctica de negocio, …una o dos veces en el año escolar, te era confiado, una bolsa con dulces, la cual deberías de ponerte a vender durante los recreos, por ahí de las 10 am y 4pm… ya que se asistía de tarde y de mañana. La maestra nos recogía el dinero, que nos había dejado la venta…al terminar del recreo… (pufff)… hoy día desconozco si se continua con esta práctica (No creo) Nos parábamos en el área de la dirección. A la entrada de la puerta principal que te conduce a las escaleras de la segunda planta.

Un día llegó un muralista y empezó a plasmar sus dibujos sobre las dos paredes planas. Por el lado oriente (estaba 5º Año) y por el poniente (6º Año) El muralista dibujo en esta ultima una estampa muy Sabinense con las montañas de nuestra periferia y claro nuestro Pico-Nariz… tan simbólico de esta tierra. En la otra pared un mural que muestra a una bella novia, una costurera que le confecciona, el vestido, mas un novio “Sin cara” a pero eso si, muy elegante… La maestra nos hacia dar entender del significado de este ultimo mural, de los “Intereses Femeninos” en busca de un novio rico, que la cara del novio no importaba mucho, lo interesante era el dinero… que forma de expresarse en aquellos tiempos… aunque… creo que sigue igual…

Después a habido otros murales en el edificio, al subir de las escaleras, en los corredores de la segunda planta pero estos, los que redacto fueron los primeros.

Tengo un recuerdo cristalizado en mente… septiembre 1958, el Salón de Actos (Actual Auditorio) lleno de bancos con pizarrones improvisados, adentro los alumnos de la Escuela Manuel María García…Había sido improvisado dicho salón ya que “La Manuel se había quemado”… En el corredor y junto a los escalones, el profesor Eugenio A. Solís G. platicando arduamente con el Profesor Francisco J. Montemayor… no es para menos. Los hijos de ambos profesores (Carolina y Rubén Eugenio) Son maestros jóvenes recién egresados de la normal y ya maestros regulares de la Anexa… dan clases en los salones junto a los murales de 6º y 5º año respectivamente.

Otro fenómeno de esa época, era la de que las maestras, no duraban con su planta, de hecho era usado mucho un término de “la señorita profesora”, ya que al contraer matrimonio, se retiraban a su casa, pasaban a ser madres de familia y a procrear hijos, en una sociedad sumamente “machista” en donde las películas de Jorge Negrete nos habían dejado una amplia escuela de machismo…

Hoy dia a la escuela le han otorgado el nombre del Emérito maestro Escuela Anexa Eugenio A. Solis G.

Por la segunda o tercera semana de Mayo antes de terminar el año escolar, oíamos los alta-voces sonar con suaves valses, los cuales retumbaban en nuestros salones, así como dentro de nuestro cerebro… La ceremonia de graduación de los futuros maestros se estaba preparando.

No había otro Escuela en el pueblo como esta. Empezó a tomar prestigio… tanto que hasta uno de los amigos del barrio, Héctor Jaime Treviño V. se inscribió para terminar el 6º año en la escuela, ya que los otros años, los había hecho en la entonces Escuela federal Venustiano Carranza… En el Centro Escolar había estudiantes de todas las edades, desde 6 años hasta los 20 años… Hoy la secundaria Antonio Solís se ha ido… aunque hace algunos años, fue inaugurado en el área del centro escolar, un Jardín de niños.