Profr. Santos Noé Rodríguez Garza

Don Santos y su Ford (Octava parte): Los ranchos

Páginas Sueltas de la Historia de Sabinas

Profr. Santos Noé Rodríguez Garza

Don Santos recorría todos los caminos de la comarca, acudía a todos los lugares donde había un papalote o una bomba de agua que reparar o en su caso instalar un aparato nuevo.

Don Santos Rodríguez conduciendo su Ford en un desfile

Profr. Santos Noé Rodríguez GarzaDon Santos recorría todos los caminos de la comarca, acudía a todos los lugares donde había un papalote o una bomba de agua que reparar o en su caso instalar un aparato nuevo.

Era una persona amigable y servicial, la vida en la aventura le había enseñado que un apuro, era necesario tenderles la mano a un necesitado.

Por ello las gentes de los ranchos por donde transitaba, le hacían encargos para que en la próxima vuelta les llevara: café, harina, manteca vegetal, azúcar, grasa industrial, tractolina, etc., etc.

Con su forma de ser: dicharachero y contador de chistes, acostumbraba cuando iba llegando a un rancho, aunque supiera donde estaba, gritaba preguntando ¿Qué rancho es éste? Y el vaquero, la señora o los niños contestaban, dando el nombre del rancho, y sabían que tenían de recompensa: una naranja, un plátano, un dulce o un puño de cacahuates.

En el Estío, en los días calurosos las personas que lo conocían muy bien y que lo trataban con cierta familiaridad, acudían de inmediato con una cubeta llena de agua y le gritaban: ¡Agua, que se quema el eje!, y Don Santos procedía a bañar con el agua los rayos de las ruedas de la fortinga, que eran de madera, se resecaban con el calor y el rodamiento y se aflojaban un poco; con el agua se hinchaban y volvían a tomar su consistencia. Ocasión hubo: en que era tanto el calor del medio ambiente, que una rueda se destrabó y se rompió un rayo, ingeniosamente Don Santos con el machete cortó un trozo de madera de barreta, y elaboró un rayo que instaló quedando a la medida y la rueda volvió a funcionar. Pudo seguir su camino, llevando la esperanza de la solución de los problemas, que ocasionaban la falta de agua, al ganado y a las personas.

Continuará…

Profr. Santos Noé Rodríguez Garza

Camioneta Ford de Don Santos Rodríguez