Para ti, hoy es un día extraordinario, llegas a la meta que un día te propusiste. Este es un día que quedará grabado en tu mente y en tu corazón para siempre.
Para ellos, tus padres; es un día de felicidad porque ven con satisfacción, que en el transcurso del tiempo que duró tu carrera, sus privaciones, sus problemas, sus inquietudes, sus esfuerzos han sido recompensados.
Para nosotros, los maestros; es un día de reflexión. Queremos que sepan que cuando nos sintamos tristes y perdidos: los recordaremos. Cuando tengamos alegrías los recordaremos. Cuando tengamos que tomar decisiones difíciles, los recordaremos. Cuando transformemos los sueños que eran vuestros, los recordaremos.
Pronto valorarán los días vividos en nuestra escuela, porque serán algunos de los mejores de vuestra vida, cuando no sabían de desconsuelos y amarguras, cuando se deslizaban por la vida con la inocencia del que apenas empieza a vivir. Cuando estuvieron en la escuela, no sabían de amarguras y desconsuelos, porque siempre tuvieron a vuestros padres para apoyarlos y motivarlos. Vuestra inocencia es grande pero en la vida se presentan muchos, grandes y graves problemas que tenemos que resolver con serenidad, con decisión y con entrega.
Pero así está el mundo y éstas son "Nuestras Cosas".
Hasta la próxima.
