Profr. Salvador Garza Inocencio

Nuestras Cosas

Nuestras Cosas

Profr. Salvador Garza InocencioUna llamada…

Aquel día era ya tarde, tarde como para no habernos levantado aún, serían acaso las diez o las diez treinta de la mañana; había sonado el teléfono, yo no escuché, pero mi esposa lo toma y recibe la llamada.

Más tarde me dice: te llamaron, te llamaron para decirte que el último de tus artículos le interesó bastante, hasta dijo que ya lo había recortado y lo había guardado.

También señaló que cuando ella se enamoró había pensado para sí, refiriéndose a quien hoy es su esposo “este es el hombre que será el padre de mis hijos”.

Dijo además que con él formaría una familia y que respetaría siempre a ese hombre. Apuntó además que las palabras escritas le habían “calado hondo” y que había hecho remembranzas de su padre a quien días antes le había llevado unos arreglos florales, para terminar dijo que había hecho un brindis y que las lágrimas habían nublado sus ojos.

Aquel día era tarde y se recibió una llamada.

Pero así está el mundo y éstas son “Nuestras Cosas”.

Hasta la próxima.