Profr. Salvador Garza Inocencio

Doña Camila

Nuestras Cosas

Profr. Salvador Garza InocencioDonde hoy se encuentran las instalaciones de “La Prensa de Sabinas, segunda época”, hubo hace tiempo un prestigiado restaurante llamado “Reforma” que a decir verdad era restaurant y hotel; y que en ese tiempo era administrado por Don Casimiro Alejandro.

Recordamos aquel hermoso pasado cuando nuestra madre nos enviaba a traer caldo de res en un traste de peltre, un sabroso caldo con repollo, papas, garbanzo, arroz y zanahoria. A las doce del mediodía el caldo y otra variedad de comidas estaban listas para los parroquianos del lugar y todo aquel que quisiera una rica comida.

Dentro del lugar enormes jarros y cazuelas negras por el hollín y al finalizar la jornada, hábiles manos se encargaban de lavarlas y tenerlas listas para el día siguiente. Quien estaba al frente de la cocina de aquel restaurante “Reforma” era una mujer bajita y de cuerpo un poquito grueso, su pelo un algo entrecano. Ella era la cocinera de ese lugar, ella era Doña Camila.

Cuando mi familia y yo nos cambiamos de casa y nos fuimos a vivir detrás de la Casa del Maestro; la conocimos más a fondo, ella vivía en una antigua casa de adobe con techo de terrado.

El patio de su vivienda era atravesado por una acequia de agua cristalina. Ella hacía tortillas de maíz a mano para vender, entre paréntesis, unas muy ricas tortillas, pan de nuestro pueblo; su seriedad y su rostro bonachón, así como su carácter sencillo y abierto le valieron el cariño de todo los que habitábamos aquel lugar donde terminaba la calle Ignacio de Maya al oriente. La gente “acomodada” del pueblo le llevaba algunas prendas de vestir para que las planchara y almidonara, utilizando aquellas viejas planchas de brasas. Doña Camila fue una mujer de mucho trabajo, de mucha entrega al trabajo cotidiano. Hoy la casa donde vivió Doña Camila es tan sólo un montón de tierra, pues el tiempo ha destruido las paredes y ha desintegrado los adobes. Pero el recuerdo de esta buena mujer aún vive en nuestra mente.

Pero así está el mundo y éstas son “Nuestras cosas”.

Hasta la próxima.

Garza Inocencio
Miembro de la Asociación de Escritores de Sabinas Hidalgo