Historias y Personajes: “El Señor del Serpentario” – cuarta parte

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Historias y Personajes: "El Señor del Serpentario" - 
cuarta parte

ENTREVISTA CON EL PROFESOR Y LICENCIADO HÉCTOR JAIME TREVIÑO VILLARREAL, PRESIDENTE DE LA ACADEMIA DE LA LENGUA VIPERINA

Pues resulta que fue, lo homenajeamos. Pero apareció al siguiente miércoles también. Ya de ahí, no volvió a fallar. Se quedó como en su casa, lo cual se lo agradecemos. Él, es el que cierra las sesiones de la Academia de la Lengua Viperina, con un humor extraordinario, porque siempre nos está recreando con sus personajes y chistes, muy propios de Agualeguas y de la región.

Verdaderamente  el Conde tiene mucha gracia y, además, se ha revitalizado. Porque él lo dice: – Me obligan a no estar repitiendo y a buscar otro tipo o darle otras salidas a los chistes. Y esto, Ramiro, es una gran ventaja en la Academia, tener personajes como el ingeniero Lupito Lozano, el doctor Carlos Alatorre, Jesús Iruegas que en su momento nos comentó que con la Academia se había revitalizado y había visto la vida de otra manera.  Iruegas, un mes antes de fallecer, me dijo: – Héctor Jaime, estoy muy agradecido con la Academia de la Lengua Viperina porque me permitió vivir cuatro años más.

Una de las frases que manejamos en la Academia es que, quien vaya a nuestras reuniones, tiene seis meses más de vida. Y parece que es cierto.

El doctor Alatorre no me deja de decir una y muchas ocasiones, que él revivió con la Academia de la Lengua Viperina. Claro, hace la guasa de que tiene que escaparse de la sujeción de su señora para ir a las sesiones. Y es uno de los que cierran con sus declamaciones. Eterno enamorado de Carolina Montemayor, desde sus mocedades. A ella le dedica poemas y piropos.

Nos hemos nutrido, también, con otra gente que le gusta declamar, un arte que ya se está perdiendo: Leonel Garza, empresario sabinense. Y hace algunos miércoles llegó Mario Valdez y ahora nos dice unos poemas extraordina-rios.

Esta Academia es un divertimiento para todos nosotros, porque aparte de escuchar de cultura y de tantos temas, la gente sale relajada. ¿Por qué los miércoles son las reuniones? Porque es el día que quiebra la semana. La gente sale fortalecida, se siente que revivió y lista a llegar al fin de semana a tambor batiente.

La única oposición para que sesionáramos los miércoles, fue la del profesor y licenciado Napoleón Nevárez Pequeño, porque resulta que él está ocupado ese día. Siempre ha pugnado para que las cambiemos al jueves. Nosotros le contestamos que precisamente sesionamos los miércoles para que él no vaya.

Pero cuando va, cuando tiene vacaciones, siempre es muy bien recibido el buen Napo, porque siempre le pone mucha sal y pimienta y siempre habla, como Martín Saláis, de su municipio. Si alguien conoce Hualahuises, es por Napoleón. Si alguien conoce Abasolo, es por Martín Saláis. Si alguien conoce más datos de Zaragoza, es por Emma Reya, o por Mirtha, de Parás. o por Elda Feliz, de Marín, o por Aarón Cadena, de General Treviño. Mario Elizondo, que no deja de hablar de Pesquería.

Nosotros aprovechamos ahí, para hacerle la burla a Mario, de que Pesquería siempre ha sido la colonia más amolada de Apodaca. Lo mismo a Martín Saláis cuando le decimos que El Carmen es el dueño de Abasolo. Incluso, hay unos letreros que dicen: "Se vende Abasolo. Infórmese en El Carmen". El maestro Saláis todavía se enoja, se exaspera. Pero no pasan de ser buenas bromas de los compañeros cuando tratamos estas cuestiones.

RES. Hiciste referencia a que organizaron un homenaje a los humoristas nuevoleoneses. Pero no es el único ciclo que han tenido. Me parece que ha habido otros.

HJTV.- Sí, como "Titanes de la oratoria nuevoleonesa", al que fue Hernando Castillo Guerra, que también se quedó con nosotros. César Lucio Coronado, excelente en oratoria. Adrián Yáñez Martínez, maestrazo. Y, lógicamente, Ramiro Estrada Sánchez.

Parto de la idea de que tenemos que revivir estas dos grandes actividades que eran parte de la formación del joven en las escuelas: la oratoria y la declamación. En algún momento se abandonaron y creo que hay que irlas fortaleciendo, revitalizando. Alguna gente creía que estas actividades son cosa fácil. Y no. Para ser un buen orador, para ser un buen declamador, se requiere mucho talento para manejar las frases adecuadas.

Continúa…