A la deuda del Héroe

De Solares y Resolanas

Hace tiempo me di cuenta de que en el panteón municipal de Villa de García se hallaba una tumba, dedicada a un joven revolucionario, un profesionista que había muerto en campaña militar en el honorable servicio médico de las tropas constitucionalistas. Se me hacía raro que una tumba de un héroe estuviera en muy mal estado. Por lo que decidí buscar algo en torno a la vida de éste prócer regiomontano cuyas raíces maternas estaban en Sabinas Hidalgo y por parte paterna estaban en el Solar Poniente de Villa de García.

En ese monumento funerario descansan los de Roberto García Larralde, nacido en Monterrey al medio día del 3 de septiembre de 1891 y llevado al Registro Civil cinco días después. Del acta respectiva se desprende que era hijo de Manuel García Treviño, de oficio comerciante, originario de Villa de García  en donde había nacido en 1860 y de Dolores Larralde García, originaria de Sabinas Hidalgo en donde había nacido en 1862. El matrimonio tenía su domicilio en la calle del Roble número 26 de Monterrey. Don Manuel era hijo de Felipe García y de Dolores Treviño, mientras que Dolores era hija de Antonio Larralde y de Dolores García. Los dos de familias muy connotadas en sus respectivos pueblos.

Roberto se incorporó en 1913 al movimiento constitucionalista encabezado por el entonces gobernador de Coahuila, don Venustiano Carranza Garza, quien tal vez tuviera alguna relación con el joven Roberto, pues la familia materna del Varón de Cuatro Ciénegas era de la antigua Pesquería Grande, como se le llamaba a la actual García, Nuevo León.

En la primavera de 1913, don Venustiano Carranza le encargó al general Pánfilo Natera que se hiciera cargo de la toma de la ciudad de Zacatecas, que era uno de los últimos bastiones o reductos fieles al dictador Victoriano Huerta. Ahí llegó Roberto en dónde ocupó plaza como subteniente del cuerpo médico. Dedicándose al servicio y cuidado de los revolucionarios, fue gravemente herido en combate el 29 de agosto de 1913. No sabemos la calidad de su herida, solo que murió en la ciudad de Zacatecas el 1 de septiembre de 1913. Contaba con tan solo 22 años de edad.

Sus restos fueron llevados al Panteón Dolores de Villa de García, en donde su familia se había hecho del lote funerario número 30. Su lápida reza la siguiente leyenda: “Roberto García Larralde, subteniente del Cuerpo Médico Militar, fue mártir de la ciencia y por la humanidad herido en combate en agosto 29 de 1913. Nacido en Monterrey el 3 de septiembre de 1891 y muerto en Zacatecas el 1 de septiembre de 1913. Su padre, hermano y hermana dedican este recuerdo a su grata memoria. D.E. P.” de lo cual se desprende que su madre, doña Dolores ya había muerto para entonces.

Luego ubiqué que su hermano al que se hace referencia en la lápida se llamaba Manuel García Larralde, quien había nacido el 22 de noviembre de 1892 en la ciudad de Nuevo Laredo, Tamaulipas. Estuvo casado con Adela González y al parecer no tuvieron familia. Trabajó 42 años en la Fundidora de Monterrey como cajero apoderado y también figuró como consejero en Seguros Monterrey y en el Círculo Mercantil Mutualista de Monterrey. Su tiempo libre lo dedicaba a la lectura de la historia y de la filosofía. De la hermana a la que también se alude no encontré información.

En los panteones de Villa de García, como en el de Sabinas Hidalgo, lo mismo que en el resto de los pueblos y municipios de Nuevo León, hay tumbas y lápidas que nos recuerdan que el honor de un pueblo, pertenece a los muertos, pues los vivos solo lo usufructúan.

Antonio Guerrero Aguilar
Cronista de la Ciudad de Santa Catarina