Se sigue bajando el cero y no contiene. Digo lo anterior en razón a lo que los medios de comunicación siguen sacando a la luz, en cuanto a funcionarios públicos que, de un día para otro exhiben un notorio cambio en cuanto a sus bienes y forma de vida.
A eso han dado en llamarle riqueza inexplicable (aunque en realidad no lo es tanto), pues ni sumando todo el sueldo devengado a lo largo de los cargos o el cargo que han ocupado u ocupan, les alcanzaría para adquirir los bienes o la fortuna que ostentan.
El caso más reciente tiene como protagonista a la alcaldesa de Monterrey, Margarita Arellanes, pues según lo publicado, apenas en el primer año en su cargo está construyendo una residencia, de poco más de mil metros cuadrados en una zona exclusiva de San Pedro, con un costo aproximado a los 20 millones de pesos.
Y no es la única residencia, pues desde la campaña por la alcaldía se supo que posee otra en Houston, Texas, debiendo agregar que actualmente reside en una casa de renta, en la que paga por tal concepto alrededor de 20 mil pesos mensuales, además de todos los gastos normales de una familia.
Al respecto, Margarita Arellanes asegura que la residencia que actualmente construye no sobrepasará los 7 millones, incluidos los dos terrenos donde levanta dicha construcción.
Por el contrario, constructores con experiencia aseguran que el valor por metro cuadrado de construcción en la zona, sin incluir el valor del predio, no baja de los mil 300 dólares.
Así las cosas, como se menciona al principio, se baja el cero y no contiene.
Castellanos
Miembro de la Asociación de Escritores de Sabinas Hidalgo
