Profr. Santos Noé Rodríguez Garza

Antecedentes de la Constitución 4ª Parte

Balbuceos

Profr. Santos Noé Rodríguez Garza

“Señores, la enseñanza es una atribución de los padres de familia o de sus delegados, porque él se interesa más que nadie en le adelanto de sus hijos.

Profr. Santos Noé Rodríguez Garza“Señores, la enseñanza es una atribución de los padres de familia o de sus delegados, porque él se interesa más que nadie en le adelanto de sus hijos. Al pacto que hace con el maestro es un pacto verdaderamente privado; el padre delega su facultad y le paga, y por esto sólo él tiene el derecho de vigilar sus actos.”

“Señores, en la república de la antigüedad, los derechos del hombre y de la familia, desaparecen ante los derechos del Estado. Los hijos pertenecían al Estado más bien que a la familia, y su educación estaba estrictamente reglamentada por la ley.”

“Entre nosotros republicanos demócratas de corazón y de conciencia, es preciso que exista la libertad civil, y por lo mismo, la libertad de enseñanza, porque la libertad de enseñanza, es un consecuencia necesaria de la libertad civil.”

“Nosotros no podemos subordinar de una manera absoluta, los derechos de los padres de familia, a los derechos del Estado, ni aún bajo el pretexto de vigilar sobre la moral, porque para nosotros el hogar doméstico debe ser un santuario.”
“La libertad de la enseñanza hará que muchos padres de familia instruidos, y muchas veces pobres, puedan educar por si mismos a sus hijos en el hogar doméstico; hará también que muchas personas acomodadas y piadosas puedan lograr algunas cantidades para la apertura de cátedras en las poblaciones en que vivieron.

“¡Mirad, señores, cuando nuevos caminos se abrirán desde luego en el inmenso campo de la ciencia! ¿Cuántos jóvenes pobres se aprovecharán de esta libertad! ¿cuánta economía para las familias! ¡Cuánto placer para los padres educando a sus hijos en la propia casa! ¡Cuánta instrucción para la República multiplicando los planteles científicos en todas partes!”

“Mirad, señores, la libertad de la enseñanza con la antorcha de la ciencia en la mano, derramando la luz por todas partes, llamando a los jóvenes cariñosamente, buscándolos hasta en las poblaciones más pequeñas y hasta en las aldeas más miserables. Miradla cómo rompe las cadenas inútiles que hoy sujetan a la inteligencia de los jóvenes y que no le permiten volar con toda aquella fuerza que Dios le ha concedido.”

Referencia: Sesión del 8 de agosto de 1856, debate del Artículo 3º Constitucional, ponente el Sr. Don Maniel Fernando Soto.

Continuará…

Santos Noé