Teniente Coronel Rafael Chapa Guajardo

Páginas Sueltas de la Historia de Sabinas

El deambular apacible de una persona trabajadora no indica lo azarosa que ha sido su existencia.

Un Veterano de la Revolución se caracteriza por la tranquilidad que lleva su vida, pero al escucharlo contar sus hazañas te das cuenta de cuán importante ha sido su paso por este mundo.

Rafael Chapa Guajardo hacía alarde de su buena memoria, contaba a quien quisiera escucharlo las fechas y los lugares en donde había expuesto su vida cuando militó en el Ejército Constitucionalista.

Había nacido en este terruño patrio el 13 de febrero de 1890, cuando apenas se apagaban los estruendos de la Invasión Francesa y aún se lloraba la muerte del ilustre patricio Licenciado Benito Juárez.

Sus padres fueron: Daniel Chapa Sánchez y Matilde Guajardo de Chapa.

Con los suyos había crecido dedicado a las tareas del campo y como todo joven de su época veía de cerca los acontecimientos que ponían en boca de todos las anécdotas de las luchas armadas de la Revolución.

Como muchos de sus coterráneos, que al paso de las huestes revolucionarias se unían a ellas, el 20 de noviembre de 1913 se incorporó al Ejército que comandaba el Mayor Antonio López.

Se inició su ascendente carrera, ya que en el campo de batalla daba pruebas de su valentía y arrostraba los peligros sin pensar en las consecuencias.

Muy pronto vio premiado su esfuerzo ya que de soldado raso pasó a:

  • Cabo el 20 de enero de 1914
  • Sargento Segundo el 15 de agosto de 1914
  • Sargento Primero el 30 de octubre de 1914
  • Subteniente el 1 de febrero de 1915
  • Teniente el 5 de junio de 1915

Su hoja de servicio está llena de fechas y lugares donde defendió su causa hasta llegar al final al grado de Teniente Coronel.

Militó bajo las órdenes de los más prestigiados revolucionarios como fueron: Mayor Antonio López, General Cesáreo Castro, Mayor José Cabrera, Mayor Juan Gastaldi, Coronel Gaspar Cantú.

Entre los hechos más sobresalientes se cuentan:

  • Asalto a la plaza de Nuevo Laredo el 1 de enero de 1914
  • Asalto a Guerrero y Mier, Tamaulipas el 10 de febrero de 1914
  • Combatió en Sabinas Hidalgo el 12 y 13 de febrero de 1914
  • Estación Salomé Botello el 11 de marzo de 1914

También tuvo intervenciones armadas donde en algunas salió ileso, otras con heridas superficiales y solamente en una donde se puso en peligro su vida.

Combatió en San Buenaventura, Coahuila, en el Rancho del Oro, Estación Espinazo, en Mamulique, Nuevo León.

Cooperó en la toma de Salinas Victoria, participó en la toma de Monterrey en abril de 1914, en la toma de Tampico en el mes de mayo; en diciembre luchó en San Juan Teotihuacán, en San Martín Tesmelucan; asistió a la toma de Puebla en abril de 1915, cooperó en la derrota del Villismo en Celaya, Guanajuato; combatió en la plaza de León de los Aldamas, en el Cerro del Gallo.

Marcharon para tomar Aguascalientes, posteriormente San Luis Potosí, y luego en Querétaro; asistió a la toma de Saltillo, Coahuila y de San Pedro de las Colonias; luego Torreón, más tarde Gómez Palacio, Mapimí, Durango.

Estos son algunos de los hechos de guerra del Teniente Coronel Rafael Chapa Guajardo, los más sobresalientes, ya que en su inagotable memoria contaba con infinidad de combates en rancherías, haciendas, lomeríos y explanadas a los que les daba poca importancia.

Salió prácticamente ileso del campo de batalla, su pundonor militar y su hombría le ganaron el respeto de propios y extraños.

El 17 de noviembre de 1972 entregaron sus familiares y amigos sus restos mortales a la Madre Tierra, recibiendo los honores militares correspondientes a cargo de la Banda de Guerra de la Escuela Normal Pablo Livas.

Viva por siempre en la memoria un héroe de la Patria TENIENTE CORONEL RAFAEL CHAPA GUAJARDO.

Profr. Santos Noé Rodríguez Garza
Cronista