Hoy día parece normal la consumación de crímenes y daños; parece normal que en el mundo impere la violencia.
Hoy día parece normal, que en la televisión, publicaciones y juegos de video se exalte la violencia.
Hoy la violencias: familiar, escolar, citadina parecen haberse apropiado del ser humano, que hoy más que nunca desprovisto de valores es presa fácil de esta degradación.
¡Violencia! ¡Violencia! ¡Violencia! Será posible que un padre de familia, no pueda controlar a un niño de cinco años y le tenga que comprar el juego de video que el pequeño dice, o se le coloque frente al televisor por muchas horas para no "lidiar" con él.
Criticamos a las autoridades por la falta de seguridad en las ciudades; culpamos a los maestros por crímenes entre los escolares; ¿Pero alguna vez nos hemos culpado a nosotros mismos como familia? porque debemos recordar que la familia es la célula primordial de la sociedad. La irresponsabilidad se manifiesta a diario, basta con salir a la calle y observar que alguien estorba en la acera, el desperdicio de agua, la basura regada, la descortesía, la agresión con el claxon o con los puños.
Se requiere rescatar la paz social, pero para eso necesitamos primero rescatar la paz escolar y principalmente la tranquilidad familiar; tenemos que volver al pasado, tenemos que rescatar los valores. Los valores florecen en la sociedad, se cultivan en la escuela, pero no olvidemos que se siembran en el hogar.
Pero así está el mundo y éstas son "Nuestras Cosas".
Hasta la próxima.
