El balero, las canicas de piedra, el trompo, el perseguido con canicas especiales llamadas agues, los presos o los prisioneros eran algunos de los juegos que se veían en la escuela de los hombres, la bebeleche o avión, los jacks y mamá Blanca una ronda muy conocida desde aquella época eran los juegos que se observaban en el patio de la escuela de niñas, lo anterior se desarrollaba en el tiempo del recreo, no había cooperativa escolar, algunos compañeros nuestros eran comisionados por el maestro para vender dulces o en forma particular alumnos vendían charamuscas o leches quemadas en una caja de zapatos.
Recordamos los recreos y en ellos también el uso de los columpios, los resbaladeros metálicos, los volantines y la ola, hoy los recreos son distintos y los juegos electrónicos. La escuela de ayer y la de hoy son distintas y a la vez las mismas, es cierto que son direrentes edificios, mentalidades y programas, pero el objetivo es el mismo: la transfertencia del aprendizaje.
Pero así está el mundo y éstas son "Nuestras Cosas".
Hasta la próxima.
