Los Juegos de la Revolución, toda una Odisea Deportiva en el evento y en organización.
La fosa para el saldo de longitud, los carriles para los cien metros. planos, para los relevos, los postes para el salto con garrocha, los obstáculos, el disco, la bala, la jabalina, las estafetas, los silbatos, la pistola, los cuadernos de anotaciones, el botiquín de primeros auxilios, los trofeos, las medallas, los diplomas, los jueces, y en tantos otros detalles en los que tenían que pensar los organizadores de aquellas grandes “mini-olimpiadas”, que se desarrollaban cada veinte de noviembre, algunas veces en el campo de aviación (hoy Unidad Deportiva Alfonso Martínez Domínguez) y otras ocasiones en el campo de S.C.O.P. a un lado de la Carretera Nacional rumbo a la ciudad de Nuevo Laredo.
Allá por el año de 1948, en los Juegos Nacionales de la Revolución celebrados en la ciudad de México, el Equipo Atlético Femenil de Sabinas Hidalgo participando en relevos cortos tuvo una brillante actuación, este equipo estaba integrado por: Graciela Garza Valle, Evangelina Mascareñas Valadez, María Santos Granados Vázquez y Emma Guadiana Saavedra.
Hoy viene a nuestra memoria el cerebro de la organización de los Juegos de la Revolución, el Profesor Víctor Alejandro Méndez, descanse en paz.
Pero así está el mundo y éstas son “Nuestras Cosas”.
Hasta la próxima.
