Mencionar navidad o natividad es fácil, lo complicado es explicarlo correctamente, el tema es muy profundo, se dice se celebra desde hace dos mil años por el nacimiento del hijo de un carpintero llamado José y de María, quien quedó convertido en Dios.
La fiesta (porque se ha convertido en ello) se ha comercializado a últimas fechas y lejos de predicar determinada filosofía religiosa, la mayoría nos dedicamos al jolgorio y a estimular a familiares y amigos con pequeños presentes.
Y no es malo si logramos acercarnos a quienes nos distanciamos por algún error cometido durante el año, rectificando el camino para vivir en armonía, unidos para luchar por la pobreza, no sólo económica, que a decir verdad es más sencillo sobrellevar que la de valores, siempre y cuando no sea extrema.
Hoy es el momento de perdonar ofensas, ratificar los sentimientos de bienestar, con esfuerzo, mucha voluntad y algo de inteligencia para conquistar la anhelada fraternidad y con alegría poder expresar: Feliz Navidad, que todos canten de felicidad.