Quetzalcóatl y las predicciones prehispánicas

De Solares y Resolanas

Los antiguos mexicanos explicaron el origen y la creación del universo con el relato de los cinco soles. El primer sol fue creado por Tezcatlipoca y fue habitado por gigantes quienes fueron devorados por jaguares. Luego Quetzalcóatl hizo aparecer el segundo sol habitado por hombres, pero huracanes lo destruyeron, algunos hombres se convirtieron en monos. El tercer sol fue formado por Tláloc, el dios de la lluvia y fue destruido por una lluvia de fuego. Algunos hombres se transformaron en aves y pudieron salvarse. Chalchiuhtlicue creó la nueva humanidad o cuarto sol, atacada a su vez por grandes inundaciones. Los hombres que se salvaron se convirtieron en peces. Los mexicas vivían en el quinto sol, presidido por el dios del sol Tonatiuh etapa en la cual predijeron sería destruido por terremotos, aparentemente el de 1985 fue la señal de la predicción de la leyenda del Quinto Sol al cual representaban con un sol en movimiento.

En el primer sol predomina la deidad Tezcatlipoca, aquel que portaba el espejo de obsidiana humeante. En el segundo tenemos a Quetzalcóatl, sacerdote, emperador y dios, confundido en su tiempo con el apóstol Santo Tomás. En el tercero está el dios del agua, Tláloc, luego en el cuarto a Chalchiuhtlique, la diosa de los lagos y del agua y en el quinto sol está el dios dador de vida, por ello se conjugan el agua, el viento, el fuego y la tierra. El Quinto Sol fue precedido por la llegada de Quetzalcóatl y concluirá con una etapa de purificación, propia del gran juicio final, cuando llegue el dueño de todo y hacedor de las criaturas.

Conviene señalar el origen de la deidad Quetzalcóatl: llegó a Tula al poco tiempo de fundada, junto con otros acompañantes. Predicaba con palabras y obras el camino de la virtud, enseñando las ciencias y el arte. Se le atribuye la invención del calendario, instituyendo el ayuno y la penitencia. Promovió el culto a la cruz al cual los antiguos consideraban el árbol de la vida y de la salud. Siempre se opuso a los sacrificios rituales y a las guerras floridas, al igual aborrecía la práctica de embriagarse para luego tener sexo desenfrenado.

Quetzalcóatl poseía el don de la profecía y por sus predicciones se ganó el desprecio de Tezcatlipoca. Los tultecos le dijeron: “si eres rey-sacerdote debes tomar pulque”. Sin estar acostumbrado, bebió hasta perder el sentido y luego lo pusieron junto a una doncella, con la cual se dice pecó. Al despertar, todos se burlaron de él y le recriminaron su conducta, en especial de alguien considerado justo y bueno. Por ello Quetzalcóatl huyó rumbo a Cholula y luego en las costas de Coatzacoalcos, entró al mar de las turquesas en una barca en forma de serpiente para gradualmente desaparecer en el horizonte. Antes de marcharse prometió regresar y cobrar las afrentas; entonces su doctrina sería recibida por todos.

Las antiguas tradiciones lo relacionan con la destrucción de Tula. En realidad vemos en este episodio la lucha entre los toltecas y los llamados chichimecas quienes destruyeron la base religiosa de una etapa gloriosa, al imponer sacrificios humanos y rituales prohibidos por considerarlos incivilizados.

Quetzalcóatl quiere decir serpiente emplumada y para algunos varón sapientísimo. En efecto, puede ser un personaje histórico singular, pues decían era barbado y rubio, como rey, sacerdote o misionero civilizador. Otros que puede ser un mito astronómico pues también lo relacionan con Venus y con los huracanes que traen la bendición de las lluvias. Para los mexicas, Quetzalcóatl era enemigo de Tezcatlipoca, un dios relacionado más bien con la Luna. Por eso, ambas deidades son como la noche y el amanecer, en continua pugna y alternalidad. Se le relaciona con Kukulkán y Topiltzin.

Su culto está relacionado con la cruz y como un símbolo de la lluvia y de los movimientos de sol. Se dice que Quetzalcóatl anunció la destrucción de Teotihuacán y el arribo de españoles en 1519, el año de la profecía esperada, cuando Moctezuma lo confunde con Cortés. El imperio tenochca aguardaba con temor y expectación la venida de la deidad buena que les enseñó a labrar la tierra y a obtener sus frutos. Pero en lugar de llegar Quetzalcóatl, arribó un contingente de españoles comandados por Hernán Cortés, quienes sometieron a los mexicas.

No obstante, la esperanza del cumplimiento de la profecía seguía más viva que nunca. La serpiente emplumada llegará un día para dar la libertad a los cautivos. En su lugar, en 1531 ocurrió un milagro que suplió la esperanza de la llegada del dios bueno que bajó al inframundo para robar las mazorcas vitales. Por eso en las principales ciudades mesoamericanas se encuentra su emblema el de la serpiente emplumada.

Según la leyenda, Quetzalcóatl nació cuando no había luz, ni movimiento ni vida en el mundo. Fue él quien instauró un orden en el cosmos y separó el cielo de la tierra. En la tradición maya, se le considera el primer Padre, el ordenador del cosmos y el dios del maíz, la deidad que creó el alimento para los humanos y produjo la vida civilizada. Y aun en el México contemporáneo, esperan la venida de la serpiente emplumada a la cual confundió Moctezuma y provocó la caída de un gran imperio.

Antonio Guerrero Aguilar
Cronista de la Ciudad de Santa Catarina